15 de diciembre de 2011

¿Curriculum? preescolar


Cuando muchas veces me pregunto si estaré haciendo lo suficiente con la educación de nuestra hija, V, de 3 años, me gusta releer el blog de Susan Lemons, Homepreschool and Beyond.

En mi medio, a los niños que van al colegio con 3 años ya se les comienza a enseñar la lectoescritura y la numeración, pero lo cierto es que no creo que esto sea necesario. ¿Cuanto antes mejor? Por supuesto que hablo no como pedagoga ni como maestra, sino como madre que hace homeschooling y cuya experiencia de la educación apenas va más allá de su casa.

Así como con J, de 7 años, suelo ser más calculadora y programadora del día a día (y a pesar de todo, le dejo bastante campo libre para sus inclinaciones personales), con V soy un poco más "hippie", y perdón si uso la palabra dándole un sentido que no sea el suyo original, más de dejarla hacer. Cada día es distinto, pero a la vez parecido. Ella juega, se le lee un poco cuando hay tiempo, pinta, recorta, sale al parque, a las tiendas, se relaciona, pregunta, baila, canta... todo sin un horario ni un lugar específico en el que hacer las cosas. El mundo es su escuela.


Hay una serie de cosas que veo claras con respecto a un niño de 3 años, y que se resumen en
que está aprendiendo a conocer su medio, 

a dar explicaciones a lo que ve y siente, 

y en que habría que ofrecerle experiencias ricas, adaptadas a su forma de ser y la etapa por la que pasa. Y si no se le ofrecen, ya las demanda él mismo.

No me parece que estandarizar la educación a estas edades sea bueno. Los objetivos que el estado español se plantea en Educación Infantil nunca los he leído atentamente. La verdad es que me pierdo al empezar, pero siempre me dio la impresión de que eran más bien metas o hechos que se supone que la media de los niños conoce o sabe hacer a esas edades.

Que me perdonen los maestros de Infantil, pero no creo que haya que "enseñar" realmente mucho de una manera formal, sino que más bien habría que poner en contacto a los niños con su medio, ayudarles a adquirir experiencias sensoriales, que aprendan cosas buenas por mimetización, que practiquen, que se dé campo libre a su imaginación, que no se les obligue a pintar sus dibujos de un determinado color...


Susan Lemons, por volver al principio, da importancia básica al "curriculum" preescolar basado en las 4 R's. Los padres y, por qué no, los maestros, podrían

fomentar las relaciones de los niños, tanto en un plano espiritual como las personales en su entorno

establecer unas rutinas diarias, mensuales, estacionales, que den seguridad al niño

leerles mucho en voz alta, muchos cuentos o lo que pidan -aunque sea Caperucita Roja por enésima vez, cuando ya la niña se conoce las frases de los personajes, sabe lo que va a pasar y te pide que por favor no grites cuando el lobo dice aquello de "para comerte mejor" porque le da miedo

estar atento para ver cuándo el niño está preparado o demanda algo, que es lo que más me ha costado a mí, junto con las rutinas

Realmente recomiendo leer el blog de Susan. Su libro todavía no lo tengo, pero ya llegará.

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