Esta semana hemos comenzado a estudiar latín. Latín, una lengua clásica todavía hablada en el mundo, aunque sea de forma restringida. La base de nuestra propia lengua, y en la que están escritos los nombres de grupos y especies de la biología. Dado el carácter de educación clásica que queremos darle a nuestros hijos, era lógico comenzar a estudiar esta lengua. Susan Wise Bauer recomendaba empezar en tercer grado, cuando el niño ya controla un poco más su propio idioma. Sin embargo, si uno se pone a pensar, Joel lleva un par de años entrando en contacto de forma lúdica con el inglés (con una clase a la semana, en que juegan, cantan, le hablan en inglés...), y por otro lado, los niños romanos antiguos aprendían latín desde que nacían. Y si habían tenido la mala suerte de ser conquistados por los romanos, lo tendrían que aprender ya con unos añitos, pues el latín era la lengua oficial del imperio.
El ejemplo de Paloma ha sido siempre un referente. Hace ya años que enseña latín a sus hijos en casa, y en esta entrada da varias ideas para que el latín no se quede sólo en los libros.
Hay otra entrada en LLPSI, sobre iniciativas para el estudio del latín a edades tempranas, en otros países, claro.
Yo también tengo Song School Latin. De momento sólo escuchamos las canciones, pero me parece muy básico, sólo tiene unas pocas palabritas en latín, y son muchas como el castellano.
ResponderEliminarNo sé, aún así me gustan las canciones.Y es genial para saber nuestra lengua más a fondo y te dá una base increible el Latín.
Besitos y suerte
Ah, no te he dicho, si dudas de alguna traducción o algo me puedes preguntar en confianza. Aunque sé que eres muy aguda con el inglés. :))
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